Mis queridos y estimados lectores, este es un post cortito, una reflexión de por que seguimos imprimiendo tarjetas y aun se entregan.
En este momento en que las redes sociales ocupan ( y absorben) nuestra vida como medio promocional, mantener nuestros perfiles Google+, Twitter, Facebook, Linkedin, etc, etc, etc, mantener la relación personal y humana con nuestros clientes potenciales y reales se convierte en un gesto valorado, el hecho del contacto personal y humano queda plasmado en el momento de la entrega del cartoncito, el intercambio de tarjetas tras una reunión tiene mas repercusión que 1.000 "me gusta" en twitter.
La conclusión es clara, en un momento en que el bombardeo publicitario nos hace cada vez mas refractarios a las redes sociales, el vinculo personal que implica la entrega de una tarjeta de visita es mucho mas elegante, personal y probablemente fructífero.
Pórtense bien, ¡por favor!
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